Dejad que cada uno decida como vivir su vida. No somos nosotros los encargados de decidir por los demás.
La conciencia de cada uno es lo que nos ayuda a discernir entre el bien y el mal, entre lo que está bien y lo que está mal. Nuestro cometido no es el de interferir en la vida y las decisiones de los demás, todo lo contrario. Nuestra misión es la de velar por ellos y acompañarles en su camino. No somos tan importantes como para creernos el centro, nuestra importancia adquiere relevancia en cuanto la tenemos en cuenta a partir del todo.
Formamos parte del Universo y como elementos que forman el puzle es cuando nuestra importancia es relevante.
Somos seres de luz que forman parte de un todo y la importancia de nuestro papel depende del lugar que ocupemos en ese conjunto.
No somos más ni mejores que nadie, somos iguales a los demás porque todos emanamos de la misma Fuente, la fuente del amor incondicional, fuente de luz, fuente de bondad, de perdón, de serenidad, fuente de ser por el mero hecho de ser.
Debemos mantenernos en nuestro centro, debemos experimentar y vivir la vida desde el “yo soy”.
Debemos creer en nosotros mismos y confiar en las herramientas, en las virtudes que tenemos para llevar a cabo nuestro plan de vida. Debemos tomar conciencia del momento que vivimos, y a partir de ahí construir nuestra realidad. ¿Quiénes somos? ¿Qué deseamos? ¿Qué queremos? Debemos conectar con nuestra alma, con nuestro ser y preguntarle qué quiere, es importante ser honestos con nosotros mismos porque de ello depende nuestro éxito, del compromiso que adquiramos para con nosotros desde la honestidad y el amor.
De nada sirve engañarnos, nuestro ser es inteligente, es sabio, la sabiduría que nos acompaña es inmensa dado que está con nosotros desde el inicio de los tiempos. Somos seres que provienen de un “mundo” donde ni el tiempo ni el espacio existen. Somos seres atemporales, las dimensiones de tiempo y espacio sólo tienen cabida en el planeta en que nos encontramos.
Dejemos, pues, de luchar contra nosotros mismos, dejemos de interferir saboteando nuestra verdadera existencia, trabajemos de manera honesta, sencilla y coordinada con lo que realmente desea nuestro ser.
Ayudémosle a manifestarse tal cual es, ayudándole a crear su realidad, aquella realidad que lo enaltece y “llena”, aquella realidad que a pesar de los momentos difíciles necesarios para aprender y así elevar su conciencia, se siente pleno y único porque, a pesar de formar parte de un todo y de emanar de la misma Fuente, somos especiales. Sí, somos seres de luz únicos y especiales, cada uno con los dones que ha elegido potenciar y con las experiencias que ha elegido vivir en esta vida para crecer, avanzar y poder elevar el grado de su conciencia.
La vida es un paseo maravilloso, es un paseo cargado de vivencias y experiencias el cual hacemos acompañados de los seres que, en su momento, así lo pactaron.
Como piezas del mismo puzle, necesitamos los unos de los otros para encajar. No debemos olvidarnos que todos jugamos el mismo papel pero con diferentes connotaciones, pero el papel de vivir en esta vida es un común denominador para todos los que nos encontramos en este plano ayudados por los personajes que nos pidieron desempeñar un papel importante en nuestra historia y supervisados por los maestros, guías y ángeles.
El guión ya está escrito, la puesta en escena depende de nosotros, de las herramientas o habilidades que elijamos para poner en escena nuestro papel. Nuestra interpretación, nuestro éxito, el que nos hará sentir plenos, dependerá de cuan honestos seamos con nosotros mismos en el momento de poner sobre la mesa y analizar con qué contamos para desempeñarlo.
Nuestras virtudes y dones se encargarán de ello. Debemos potenciar los que nos caracterizan y mejorar aquellos aspectos que desde la conciencia aceptemos que forman parte de nuestro ser pero que son susceptibles de experimentar un cambio.
En nuestras manos está el poder del cambio, los demás sólo son herramientas puntuales para ayudarnos a llevar a cabo ese giro, ese cambio.
Somos creadores de nuestra realidad por ello debemos confiar en nosotros mismos y creer, debemos creer y apostar por nosotros, por nuestro éxito porque él depende de nuestro compromiso para con nosotros mismos.
Soy Lady Nada. Sois unos maravillosos seres de luz y por eso os queremos!!
Canalizado por Montse Macanás el martes 5 de junio de 2012 a las 3:30 am.
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